«Recurrieron al canibalismo»: revelan cómo sobrevivieron los atrapados en una mina

Este país cuenta con 6.000 minas abandonadas, que a menudo son ocupadas por mineros clandestinos conocidos como ‘zama zamas’, que se traduciría como ‘los que prueban suerte’.

Los mineros ilegales atrapados en las profundidades de una mina ilegal en Sudáfrica «recurrieron al canibalismo» para sobrevivir después de que las autoridades cortaran el suministro de alimentos para obligarlos a salir, informó el lunes The Telegraph.

«Sacaron partes de piernas, brazos y costillas para alimentarse. Decidieron que era la única opción que les quedaba para sobrevivir», afirmó una de las personas que salió con vida de la mina de oro de Buffelsfontein, cerca de la ciudad de Stilfontein, en la provincia del Noroeste. Aunque él y su colega insisten en que no participaron en tales actos, se vieron obligados a comer cucarachas tras quedarse sin comida.

A mediados de enero, los equipos de rescate recuperaron 78 cadáveres y sacaron a 246 personas de los pozos abandonados de una de las minas más profundas del país. Las muertes ocurrieron en un prolongado enfrentamiento entre la Policía y los mineros ilegales, que se ganan la vida extrayendo lo que queda de los yacimientos, explica el medio.

En total, 1.907 mineros ilegales han salido desde el inicio de la Operación Vala Umgodi (Cerrar el agujero) en agosto del año pasado, según el Servicio de Policía de Sudáfrica, pero cientos más se negaron. En el marco del operativo, la Policía redujo el suministro de alimentos y agua.

En noviembre, la ministra de la Presidencia de Sudáfrica, Khumbudzo Ntshavheni, anunció que era necesario «hacer salir con humo» a los mineros ilegales —que eran entonces aproximadamente 4.000—,  en lugar de arriesgar las vidas de los policías.

El país africano, rico en recursos mineros, cuenta con 6.000 minas abandonadas que se han agotado o que ahora no son rentables, que a menudo se convierten en objetivos de mineros clandestinos conocidos como ‘zama zamas’, que se traduciría como ‘los que prueban suerte’.

Los dos mineros que hablaron con el medio contaron que entraron en un pozo en julio de 2024 y trabajaron en las líneas de suministro transportando alimentos y personas a las profundidades mediante cuerdas, ganando 400 libras esterlinas (unos 500 dólares) al mes.