El abogado del ex funcionario busca el cambio en las medidas cautelares, pues Duarte se encuentra bajo prisión preventiva desde junio de 2022
El ex gobernador de Chihuahua, César Horacio Duarte Jáquez, podría quedar en libertad este 4 de mayo si su defensa logra que quede sobreseído el proceso en su contra por su presunta responsabilidad en delitos de peculado y asociación delictuosa durante su mandato (2010-2016).
El ex mandatario estatal está procesado bajo la carpeta de investigación 3041/2019 en donde se le acusa de los delitos de peculado y asociación delictuosa, al presuntamente desviar 96.6 millones de pesos del erario.
Esta carpeta es la única en que se sustentó la solicitud de extradición a EEUU, por lo que al quedar sobreseído quedaría abierta la puerta al priista para dejar la cárcel.
Duarte Jáquez se encuentra bajo prisión preventiva desde junio de 2022, cuando fue extraditado desde Estados Unidos a México. Cabe destacar que el político tricolor fue detenido en Florida desde julio de 2020.
La mañana de este jueves dio inició la audiencia; sin embargo, el ex priista no se presentó ante la jueza de control, Delia Valentina Menéndez, en la sala del Tribunal Superior de Justicia en la capital del estado.
Al respecto, la defensa del acusado justificó que el actuario no notificó debidamente a su cliente por lo que el ex mandatario no sabía que debía estar presente.
Por esa razón, la jueza de control declaró un receso en la audiencia hasta que César Duarte pudiera acudir de manera presencial a la diligencia.
Uno de los abogados acudió al Centro de Readaptación Social de Aquiles Serdán para tramitar los oficios y obtener el permiso para el traslado de Duarte ante la jueza de control.
De qué estaba acusado Duarte
El chihuahuense está acusado de peculado agravado y delito electoral, en una de las causas estaba imputado por el desvío de 96 millones de pesos a través de contratos simulados con empresas fachada. Además, contaba con otras 20 acusaciones a cargo de la Fiscalía General de Chihuahua.
A nivel federal la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (Fepade) lo señala por presuntos delitos electorales, al desviar dinero a campañas de candidatos del PRI.
Duarte está recluso en el Centro de Reinserción Social (Cereso) número 1, ubicado en el municipio de Aquiles Serdán, en Chihuahua. El pasado 25 de marzo, a tres años de su ingreso al centro penitenciario, el exgobernador redactó una carta dirigida al Tribunal Superior de Justicia del estado, en la que acusó que su caso está siendo utilizado como botín político.
“A casi tres años de estar privado de mi libertad y de mi patrimonio, dejé de ser un perseguido político y sólo soy un botín político para un muy cuestionable interés político”, expresó a la magistrada presidenta, Myriam Hernández Acosta, en la misiva difundida el 29 de marzo.
Sin embargo, el ex funcionario aseguró que esto no significa que busque indulto, sino un juicio justo en el que afirmó “les dará la seguridad de que lo que de mí se dijo sólo fue un gran teatro”.
En 2021, Duarte también acusó a Javier Corral, ex gobernador de Chihuahua, por daño moral debido a acusaciones públicas en su contra y presuntas violaciones al proceso penal.
Y es que la investigación en su contra comenzó durante el gobierno de Corral, quien lo sucedió como gobernador en 2016, aunque fue hasta 2021 que se logró su detención.
Respecto a esta situación, Corral aseveró que se trataba de un “acto de cinismo, de descaro y una ofensa al pueblo de Chihuahua”. Y es que hasta ese momento sobre Duarte pesaban 80 amparos perdidos, 21 de ellos contra orden de aprehensión y uno con el que buscaba evitar la orden de extradición