Con mayoría de Morena, PT y PVEM, el dictamen fue aprobado y remitido ya al Senado de la República
Por Olivia Vázquez Herrera
El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró que en la madrugada la Cámara de Diputados aprobara la Reforma a la Guardia Nacional, la cual tiene por objetivo que la corporación pase tanto administrativa como operativamente a las filas de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“Estoy muy contento y además tranquilo porque al aprobarse la reforma para que la Guardia Nacional dependa de la Secretaría de la Defensa va a significar que todo el esfuerzo que hemos hecho para crearla, que en cinco años hemos creado una institución que tiene todo el respaldo del pueblo, que todo este esfuerzo no se eche por la borda con el paso del tiempo, que esto no se destruya, que no vuelva a suceder lo que ya se padeció con la Policía Federal”, dijo el mandatario durante su tradicional conferencia mañanera en Palacio Nacional.
Y es que el presidente aprovechó para recordar que en su momento, Genaro García Luna estuvo al frente de la Secretaría de Seguridad Pública -de la cual dependía la extinta PF- y ahora, tras sus actos de corrupción, está preso en Estados Unidos y condenado por delitos relacionados con el narcotráfico. Fue por ello que decidió sustituirla al inicio de su sexenio y crear a la GN, institución que -dijo- ha fortalecido a lo largo de estos cinco años, “antes no les importaba la seguridad pública, en su mejor momento eran 20 mil elementos operativos para todo el país
Rechaza que se militarice a México
AMLO negó que se vaya a militarizar al país y dijo que eso depende de los mandos civiles, porque -de acuerdo con las leyes de las Fuerzas Armadas- es el comandante supremo (próximamente comandanta) quien da las órdenes, tal como ocurrió en la matanza de estudiantes en Tlatelolco en 1968 o como cuando el expresidente Felipe Calderón sacó a los militares de sus cuarteles para combatir al narcotráfico.
Para demostrar que la corporación va por buen camino, AMLO mostró una serie de láminas provenientes de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2023, presentada hace unos días por el Inegi, en la que se aprecia que la Guardia Nacional, la Marina y el Ejército son las tres autoridades en las que más confían los mexicanos; las que mejor desempeño tienen y las que perciben con menos corrupción.
¿De qué va la reforma a la GN?
De acuerdo con el dictamen enviado por AMLO el pasado 5 de febrero, se busca reformar el Artículo 29 Constitucional que actualmente un “candado” para que las instituciones de seguridad pública tengan mandos civiles; sin embargo, con los cambios, se busca que la Guardia Nacional pase a formar parte de las Fuerzas Armadas, aunque no tendrá funciones o tareas similares a las de Ejército, ya que seguirá al frente de la Estrategia Nacional de Seguridad.
El dictamen también contempla ajustes al Artículo 129 constitucional -que limita las funciones de elementos castrenses en tiempo de paz- a raíz de que hace tres años se hizo una reforma al Artículo 29 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal para que la Sedena pueda prestar sin límite los servicios auxiliares y civiles que el presidente de la República le señale, vulnerando así la Carta Magna que señala que en tiempos de paz, ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar.
La reforma también indica que si alguno de sus efectivos incurre en algún probable delito o presunta violación a los derechos humanos de los ciudadanos, los tribunales militares deberán estar enterados si hay quejas o denuncias y serán los únicos que podrán investigar y juzgar, ya no las instancias civiles de procuración de justicia; además, la Guardia Nacional también coadyuvará en la investigación de delitos, que hasta ahora solo contempla en el Artículo 21 constitucional como facultad exclusiva del Ministerio Público y las policías.
Vale mencionar que luego de una maratónica sesión en el reciento legislativo de San Lázaro, la aplanadora de Morena y sus aliados nuevamente se impuso a los diputados de la oposición, que en todo momento se pronunció en contra de lo que ellos llamaron “la militarización del país”, sin embargo, al final el oficialismo venció y aprobó el dictamen en los general y lo particular con 353 votos a favor, 126 en contra y cero abstenciones.
La Reforma a la Guardia Nacional avanzó ahora al Senado de la República, donde se prevé que sea analizado en comisiones y el pleno a partir del martes 24 de septiembre; luego, de aprobarse, seguirá la misma ruta que la Reforma al Poder Judicial y se turnará a los congresos locales, donde requiere 2/3 de aval para poder ser legitimada, promulgada y publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF).