El partido dirigido por Moreno Cárdenas lanzó un fuerte mensaje al presidente de la Mesa Directiva del Senado, uno que internautas calificaron de “amenaza”
Por Mayte Baena
Los nombres de Gerardo Fernández Noroña y Alejandro ‘Alito’ Moreno Cárdenas, se mantuvieron en tendencia desde la tarde del pasado jueves 31 de octubre debido a que ambos protagonizaron una acalorada pelea en el Senado. Aunque ambos han dado a conocer sus posturas, la que emitió el Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue la que más llamó la atención por la siguiente razón.
Mediante la red social X -antes llamada Twitter-, el partido tricolor y que además dirige Moreno Cárdenas, difundió una foto del presidente de la Mesa Directiva del Senado siendo cargado y retirado por policías, mientras éste se opone.
La instantánea además, estuvo acompañada por un mensaje que generó polémica, especialmente porque algunos internautas señalaron que se trataba de una amenaza, mientras que otros mencionaron que es el mismo partido el que suele ser generador de violencia. Ninguno de los comentarios que la publicación recibió tuvo respuesta.
“Si usted @fernandeznorona no desapareció cuando lo arrastraron por las calles por insolente y majadero, y hoy es el presidente del Senado, tenga confianza en las vueltas que da la vida”, se lee en el post.
“Pero si ustedes se pintan solitos cuando se trata de desaparecer gente y dinero. Y si no pudieron desaparecerlo, es porque lo subestimaron y pensaron que jamás tendría alguna relevancia política”; “Son unos pinches cínicos, y para ejemplo el terrible caso de la guerra sucia donde su partido dictadura desapareció a miles de opositores, lávense el hocico lleno de sangre que tienen antes de ladrar” o “Cómo les arde el poder de Noroña”, se lee en redes sociales.
¿Por qué fue la publicación del PRI contra Noroña?
Antes de difundirse la instantánea a través de las cuentas oficiales del partido, el senador y militante del Partido del Trabajo, publicó una fotografía donde se observan los curules ocupados por los legisladores del PRI previo a la sesión del jueves 31 de octubre.
Los lugares de los integrantes de la Cámara Alta se encuentran vacíos, por lo que el senador y simpatizante de la denominada Cuarta Transformación escribió:
“La dictadura ya desapareció al grupo parlamentario del @PRI_Nacional en el @senadomexicano”.
Al hacer uso del término “desaparecer”, fue que el PRI también lo usó, generando debate en las plataformas digitales. Cabe destacar que horas después fue que se dio la pelea entre ambos integrantes del Poder Legislativo y por ello se volvieron tendencia de manera inmediata.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue considerado uno de los partidos políticos más influyentes en la historia de México. Fue fundado el 4 de marzo de 1929 por el expresidente Plutarco Elías Calles bajo el nombre de Partido Nacional Revolucionario (PNR). Su creación tuvo como objetivo estabilizar el país tras la Revolución Mexicana y unir a las diversas facciones revolucionarias en un solo partido político.
En 1938, durante el gobierno de Lázaro Cárdenas, el partido fue reorganizado y pasó a llamarse Partido de la Revolución Mexicana (PRM), adoptando una estructura corporativista que incluía sectores como el obrero, campesino, popular y militar.
Finalmente, en 1946, el partido adoptó su nombre actual, Partido Revolucionario Institucional, bajo el liderazgo de Manuel Ávila Camacho. El PRI dominó la política mexicana durante gran parte del siglo XX, gobernando el país de manera ininterrumpida desde 1929 hasta 2000. Durante este periodo, consolidó un sistema político caracterizado por una presidencia fuerte, un control considerable sobre el poder legislativo y una cercanía con diversos grupos económicos y sociales.
En el año 2000, la hegemonía del PRI fue interrumpida cuando Vicente Fox, del Partido Acción Nacional (PAN), ganó las elecciones presidenciales. El PRI regresó al poder en 2012 con la elección de Enrique Peña Nieto, pero fue nuevamente derrotado en 2018. A lo largo de su historia, el PRI ha sido tanto alabado por su papel en la modernización de México como criticado por prácticas autoritarias y escándalos de corrupción.