En un formato simple rayando en lo austero el Instituto Estatal Electoral llevó a cabo el debate entre los seis aspirantes a la presidencia de Chihuahua.
Daniel Quezada del partido Pueblo, Miguel La Torre por la coalición Morena PT, Rosario Montoya del partido Verde, Hilda Sanchez por México Republicano Chihuahua y Marco Bonilla por la coalición Pan PRI y PRD, y Carlos Enrique Valles Zavala de MC, asistieron a las instalaciones de la Facultad de Contaduria en el Campus 2 de la UACH para exponer sus propuestas.
Como era de esperarse en el debate hubo ataques en su mayoría de los candidatos Miguel La Torre y Kike Valles contra Marco Bonilla, mientras tanto las candidatas Rosario Montoya e Hilda Sanchez mostraron una falta de preparación y conocimiento al momento de responder las preguntas sacadas de las urnas por los moderadores Idalí Ferrá y Akbar Delgado.
Por su parte el candidato del partido Pueblo Daniel Quezada, en su oratoria estilo pastoral, trató en un principio de crear empatía con quienes presenciaban el debate, fue casi en la ronda final cuando sacó algunos afiches señalando lo que para él eran fallas, carencias y corrupción tanto en Morena como en la administración de Bonilla.
Mientras que las candidatas Rosario Montoya e Hilda Sánchez ez por momentos se les vió perdidas o fuera de concentración. Montoya en una de sus intervenciones pretendió ensalzar a Claudia Sheinbaum como lo estaba haciendo La Torre, pero no se sintió cómoda y no volvió a mencionarla.
la candidata de Mexico Republicano más parecía que en el fondo admira a Bonilla, pues el subconsciente la traicionó diciendo «estoy de acuerdo con el alcalde» para despues validar algunas de las acciones y proyectos expuestos por Marco Bonilla.
Lo que no fue sorpresa ni era de extrañarse fue el desempeño de Kike Valles, sabedor que está muy por debajo de las encuestas o la aceptación ciudadana, buscó mediante la denostación y ataques con tono de mofa hacia Marco Bonilla figurar para hacerse visible en esta contienda electoral
Hubo propuestas, sí, algunas son descabelladas sin fundamento, otras con posibilidad de ser realizadas.
El ejercicio sirvió, si asi se puede decir, para que el electorado defina por cual candidato o candidata habrá de votar este 2 de junio. Pues no basta con decir que tal o cual aspirante tiene las mejores propuestas o fue más aguerrido al momento en que le tocara el turno, lo más importante es haber visto la experiencia, el conocimiento de las necesidades sociales y el manejo de las politicas públicas.
Este 2 de junio es sumamente importante que todos salgamos a votar como un acto cívico y democrático.